La cantante estadounidense inicia una maratónica gira de adiós que se llevará a cabo en el transcurso de dos años (2018-2019). Bautizada “Fare Thee Well” (“que estés bien”), la icónica cantante contestataria de los años 70 se instala en la sala Olimpia de París para 10 conciertos que ya agotaron su
“Soy la última hoja del árbol, el otoño se llevó el resto”, canta Joan Baez, con 77 años, el cabello blanco y una voz que se ha vuelto más grave, aunque con una actitud comprometida intacta.
Una canción de su última producción, por ejemplo, alude a una matanza perpetrada en una iglesia negra en Charleston en 2015, que figura en su último disco Whistle Down the Wind, casi 60 años después de su primer álbum, en 1959.
Joan Baez llevaba entonces largos cabellos color azabache, parte de su herencia mexicana. Se convertiría en un ícono contestatario de Estados Unidos, comprometida con los derechos civiles o contra la guerra de Vietnam. Pero también en una figura de la música folk y compañera durante un tiempo de Bob Dylan.