Hace unos días, la NASA informó que un equipo científico internacional lanzó desde la pequeña localidad ártica de Ny-Alesund, un cohete denominado ICI-5 (Investigación de Irregularidades en Cúspides-5) siendo esta la primera de tres misiones que la agencia espacial y otros países, realizarán para estudiar una anomalía atmosférica que ocurre en las regiones polares.
Dichas misiones analizarán el campo magnético de la Tierra en busca de una explicación de por qué la tecnología enloquece en los polos terrestres, según revela un comunicado de la NASA.
Y es que las comunicaciones globales, como la señal de GPS, presentan problemas al atravesar la turbulencia atmosférica en la cúspide, por lo que este fenómeno confunde la señal y expone la seguridad del transporte que usa GPS como los barcos y aviones, impidiendo que puedan llegar a sus destinos.