¿Qué tienen en común la aguja de 123 metros de la catedral inglesa de Salisbury, tres miembros de la inteligencia rusa, un ataque químico y un sitio web?
Alexander Petrov y Ruslan Boshirov son los dos funcionarios rusos a quienes Reino Unido responsabiliza por el intento de asesinato de Sergei Skripal, un exespía de Rusia que le pasaba información al gobierno británico.
En marzo de este año, Skripal casi perdió la vida tras entrar en contacto con el agente nervioso Novichok en la ciudad en la que vivía, Salisbury.
Cuando imágenes de cámaras de seguridad revelaron que los dos sospechosos habían estado en la ciudad poco antes del ataque, dijeron que solo eran turistasy que viajaron a Salisbury para conocer la catedral.
Pero un sitio web de investigación llamado Bellingcat, reveló una versión de los hechos totalmente distinta.