Que difícil es para mi con 66 años ayudar a un chaval de 33 años, ex drogadicto de la cocaína que se esta desintoxicando. Yo lo hice hará muchos años cuando yo era joven, entonces yo tenia eso: juventud y muchas capacidades para ayudar.
Ayer estuve andando con él por las calles de este bonito Madrid, yo mi paciencia y aguante estuvo al limite, iba a recibir su tratamiento, le acompañe. Cuando hace años me asesore en departamentos que ayudan a los drogadictos ya me avisaron el trabajo con ellos es complicado: mienten mucho y te estresan mucho. Solo pido a Dios una cosa, poder seguir ayudandole. jl
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